AEGE (la Asociación de Empresas con Gran Consumo de Energía), que agrupa a empresas que concentran un 12% de todo el consumo de electricidad en España está preocupada por como pueda afectar la reforma energética al precio de la luz y con ello a sus exportaciones y competitividad.
Las medidas adoptadas podrían provocar un «importante sobrecoste» que sea repercutido directamente sobre el consumidor industrial, lo que conduciría a la «definitiva pérdida de competitividad de la gran industria», advierte la asociación. Además señala que la industria se encuentra muy castigada ya desde la liberalización del sector energético y el iniciase una escalada de precios superior al 60%. Para muchas empresas, la energía representa el principal coste de producción.
Los grandes consumidores de luz advierten de que las medidas aprobadas por el Gobierno ya están teniendo efectos en los mercados. De hecho, entre el 14 y el 17 de septiembre el mercado de futuros ha experimentado «bruscas subidas» que no se han producido en otros mercados europeos, lo que «anticipa el traslado íntegro de las tasas al consumidor español».
Consideran que la industria representada por los grandes consumidores es «básica» para el «presente y futuro» de España, cuya actividad se está manteniendo gracias a las exportaciones realizadas.
«Un nuevo incremento en el precio de la energía eléctrica supondrá el cierre definitivo de muchas de las instalaciones de la industria básica y de sus suministradores directos, y la pérdida de competitividad del resto frente a los productores de otros países como Francia, Alemania, Noruega, Canadá, EEUU, Sudáfrica o China», señala.